Caracolí es una finca turística que le ofrece al viajero una inmensa variedad de distracciones al mejor estilo de las fincas cafeteras del Quindío. Permite que el turista se sienta a gusto y familiarizado con su entorno. Es un bosque verde e intenso con cafetales por todas partes, un rincón precioso del mundo, donde el hombre vive en armonía con la naturaleza.